10 motivos. Si puedes elegir, mejor una moto con frenos ABS Más de un purista no quiere ni oír hablar de controles de tracción, ABS... Pero no te hagas líos, hay «modernidades» que funcionan increíblemente bien
Compra una moto con ABS
No resulta extraño escuchar a algunos «puristas» quejándose de las motos modernas, que si tienen mucha electrónica, controles de todo tipo, frenos con ABS... Lo dicen como si conducir una moto moderna, con avances técnicos , no fuese pilotar. Vamos, que el piloto pierde su importancia y nos convertimos en meros jinetes de caballo de picadero, que por mucho que les digas por dónde quieres ir, hacen lo que les da la gana. Éstos rehuyen, incluso, de la inyección electrónica.
No les hagas caso. Por muchos controles y avances que tenga una moto, siempre serás tú quien la lleve. Y con el ABS pasa lo mismo. Se trata de uno de los elementos de seguridad más importantes de una moto. Incluso en las ultradeportivas, tanto en carretera como en circuito, su intromisión resulta tan leve que muy pocos usuarios lo notarían. También te lo recomendamos en un scooter (muchas marcas ya ofrecen la posibilidad), aunque sólo lo uses por ciudad. Los «traileros» agradecen la posibilidad de desconectarlo, pues pulsan el «off » en la tierra, y «on» en «lo negro». Lo dicho, no encontramos ningún motivo para no comprar con ABS, salvo el económico, y no es para tanto.
1.El primer motivo, y principal por el que comprar una moto equipada con ABS es por seguridad. No hay color en lo que se refi ere a frenada, con lo que ofrece una moto sin ABS.
2.Las versiones CON vienen a ser unos 500 ó 600 euros más caras que las SIN, poca cuantía sin tenemos en cuenta que se trata de unos de los elementos de seguridad activa más importante.
3.El peso extra que conlleva el ABS no puede ser motivo para rechazarlo. Serán unos 5 kg, una cantidad que no vas a notar en marcha (ni en parado) pero que salva vidas.
4.A la hora de vender la moto, está claro que es un extra muy cotizado, incluso podrías recuperar lo pagado de más respecto a cuando la compraste, o hacer que vendas más rápidamente la moto.
5.Si no te convence, algunos modelos permiten su desconexión. Esto puede ser muy útil en las trail, una vez que entras en el campo el ABS puede convertirse en un inconveniente, pero no en el asfalto.
6.Que sepas que si en tu punto de mira está la compra de un scooter, éstos también ofrecen versiones con ABS, y funcionan igual de bien que en las motos más grandes.
7.No piendes que a ti no te compensa porque sólo uses la moto en ciudad y a baja velocidad. El asfalto en la ciudad suele estar muy sucio, con grasa, tierra..., y no te olvides de los pasos de cebra.
8.Si tienes una deportiva estás de enhorabuena. El ABS es tan poco intrusivo que ni vas a notar que lo llevas, incluso aunque te metas en circuito. Hay que ir muy a saco para que estorbe.
9.El ABS no es sólo para los días de lluvia, en seco también saca a relucir sus virtudes. Y es que nunca sabes cuándo vas a tener que realizar una frenada de emergencia, ni sobre qué superfi cie.
10.Seguro que no se te ocurriría a día de hoy comprar un coche sin ABS, entonces, ¿por qué te lo planteas en el caso de una moto cuando encima sólo tienen dos ruedas en vez de cuatro?
EN MOTOCICLISMO.
PASCU
RAFAGAS