Como colectivo un tanto especial que somos los motoristas, la Mutua Motera ha publicado una serie de consejos especialmente destinados a los usuarios de las dos ruedas, para que puedan disfrutar al máximo de las vacaciones de Semana Santa. Además de
los valiosos consejos que no ha hecho nuestro compañero Javier, vamos a añadir unos cuantos especiales para nosotros.
Durante estos días salimos a la carretera compartiendo el espacio con un gran número de usuarios y vehículos. Muchos de estos usuarios tan solo se mueven por trayectos interurbanos en ocasiones señaladas como Semana Santa, puente de la Constitución, etc y carecen de los conocimientos, destreza y experiencia mínima necesaria para ser seguros en carretera abierta. Para disfrutar estas vacaciones deberemos prestar una especial atención a ciclistas, turismos y estado de la carretera y elevar nuestra cota de prevención en cruces, maniobras de adelantamientos y curvas.
Observa atentamente las maniobras y probabilidades de maniobra de otros vehículos. Haz tú análisis de riesgos y no asumas más de los lógicos para desplazarte. Debes garantizar que tú circulación y forma de circular es compatible con el momento… eso puede salvarte la vida. Para lograr circular con seguridad, practicando una conducción anticipada, debes reconocer el valor que tiene la principal arma, la observación y por tanto, la atención permanente en la conducción. La segunda de las armas es la distancia de seguridad, nos dará tiempo y espacio.
En cruces, las señales, carteles y determinados nervios de la estructura de un turismo, pueden ser algunos de los obstáculos visuales para que su conductor no pueda vernos. Cuando localices un turismo con intención de incorporarse a la circulación y que pudiera cortar tu trayectoria sigue estos consejos:
- Reduce la velocidad.
- Varía tu posición lateral dentro de tú carril, ajustándola a las circunstancias, para lograr que te vea.
- Incrementa tu estado de alerta.
- Apoya de forma cautelar dos dedos sobre la maneta del embrague y dos sobre la del freno delantero. Todo ello te dará tiempo y espacio y te ayudará a decidir una maniobra de respuesta funcional.
En las maniobras de adelantamiento, los puntos o zonas muertas para la visión desde la posición de conducción de un turismo son uno de nuestros principales problemas. Cuando realices una maniobra de adelantamiento por la izquierda debes:
- Iniciarla solo cuando tengas garantías de finalizarla con éxito.
- Mantener la distancia de seguridad lateral con el vehículo adelantado. Calcula 1,5 metros.
- Si ves cualquier movimiento sospechoso del vehículo adelantado como circular a velocidad muy reducida o que va realizando “eses”, espera cualquier maniobra que pueda cortar tu trayectoria.
- Recuerda que durante la maniobra de adelantamiento existe habitualmente una zona donde el conductor del turismo no te ve. Esta zona se amplía o reduce atendiendo básicamente a cuatro factores: Características de los retrovisores del vehículo adelantado, adaptación y graduación de los retrovisores del vehículo adelantado, distancia lateral a la que circulamos con relación al vehículo adelantado y posición del conductor del vehículo adelantado.
Mucho cuidado al negociar curvas. Presta especial atención a los siguientes consejos para evitar salirte de tu trayectoria en una curva:
Salirte recto:
- Frenar muy fuerte a la entrada o durante su trayectoria.
- Despistarte o no permanecer atento a la conducción.
- Exceso de velocidad. Velocidad inadecuada a las características del trazado.
- Gestión de maniobra evasiva ante la presencia de obstáculos en la calzada.
Salirte a rastras:
- Mal estado del firme con bajo coeficiente de rozamiento.
- Presencia de sustancias o elementos deslizantes modificadoras de la adherencia (agua, hojas, áridos, gasoil, aceite, etc).
- Se reitera el exceso de velocidad. Velocidad inadecuada a las características del trazado.
- Exceso de inclinación terminando la banda de rodadura del neumático o con neumáticos fríos.
- Frenar de forma súbita cuando nos encontramos muy inclinados.
- Acelerar de forma súbita cuando nos encontramos muy inclinados.
Recuerda que para negociar una trayectoria curva debes saber antes como es y como está. Para ello, primero debes asomarte para poder ver y luego decidir dónde, cómo y cuándo.
Acuérdate de parar de vez en cuando. No haber dormido y descansado en condiciones genera una pérdida de condiciones psicofísicas importantes, especialmente las relacionadas con los reflejos. La localización, valoración y gestión de incidencias se vuelve lenta y pesada… las sensaciones en la conducción se vuelven torpes, se genera una pérdida de tacto en el gas y frenos, etc.
Descansa también durante la conducción, es recomendable parar cada dos horas de viaje. Si eres motorista de más de 50.000 kilómetros al año podrías estar acostumbrado y entrenado para jornadas de más de 8 horas conduciendo… si eres de esos… tal vez puedas descansar cada 3 horas de viaje sin perder excesivas capacidades para la conducción.
Ojo a las zonas de obras. Aunque se encuentran paradas en la mayor parte de las ocasiones, esto genera un abandono sistemático, ya tradicional, de su mantenimiento, presentando en ocasiones situaciones incompatibles con la seguridad vial. Cuando te enfrentes a un tramo en obras recuerda tres aspectos fundamentales:
- Sobre la calzada o el arcén te puedes encontrar señales tumbadas de difícil percepción, especialmente en conducción nocturna.
- La presencia de áridos o barro en la zona de paso puede hacer que pierdas la adherencia.
- Mantén la alerta a otro tipo de obstáculos que pueden encontrarse en tú trayectoria como barreras de plástico, etc.
Y sobre todo, disfrutar y os quiero a todos de vuelta.
PASCU
RAFAGAS